El Poder de una "Caja de mercado" +

                                                                                                                                                  

….estaba en el mercado de la plaza del Reino paseando tranquilamente, cuando de pronto y ante un pequeño tumulto en uno de los puestos de verduras me percato de que un bribón ataviado con ropajes un tanto extraños hace ademán de exigir con la verborrea característica de estos personajes a la buena moza que estaba con su padre despachando las zanahorias y los tomates, que porque, tardaban tanto con los pesos y las balanzas romanas.

-¡date prisa muchacha! –Dijo el Bribón.

-Ahora le despacha señor. –Dijo el padre de la moza con una amabilidad para quitarse el sombrero.

-¡Vamos, que no tengo todo el día! –Replicó de nuevo el Bribonzuelo.

-¿Qué te pasa a ti, acaso no ves que esta honrada familia trabaja y no como tú que estas de pasada? – Le contestó un servidor.

- Tu no te metas donde no te llaman, Monje. –Contestó el bribón.

- Para ti no soy monje, sino Caballero del Temple y segundo, te esperas a que te toque tu turno como todos estos campesinos que vienen a buscar sus víveres y si no, ya te estás largando de aquí, pero rápido. –Le contesté, apartando mi capa de delante y dejando ver la empuñadura de mi Espada.

-Entendido, entendido, entendido, no se preocupe……

      Me levanto pronto, todos duermen, me aseo y me propongo aprovechar el tiempo para ir a primera hora a comprar para la cena ¡toca pà amb oli! Porque hoy juegan nuestros muchachos contra los Lusos, pues eso al Eroski de sa cabana en es Pont d’Inca – Marratxí y cuál es mi sorpresa que cuando esperaba en caja para finalizar mi compra pagando como es natural, un individuo dice:

-“¡que pasa, que no podéis poner a otra persona en la caja! ¡Con la de gente que hay en el paro!”

Eran aproximadamente las 10:20 de esta mañana y este señor de 40 años +o- se quejaba porque no tendría otra cosa que hacer, le recomiendo una lista de sugerencias para que haga en su tiempo libre y que al menos no desaproveche el tiempo y se entretenga, ahí van:

* Había una majísima y rápida cajera, doy fe, y en la otra caja había ocupado su puesto dejando el otro libre, el carnicero, dejando en cada línea solamente a 4 personas que estábamos allí.

Le aconsejo que en vez de despotricar contra los empleados que se han callado en respuesta a sus palabras, mejor vaya a dar por el saco a Son Morro en la central y sede de la empresa que distribuye esos artículos que Usted compra.

* Vivimos por suerte en unos años, donde no existen los Monopolios, por lo tanto:

Le aconsejo que si no le gusta el servicio busque otro, porque no será por hipermercados, supermercados, autoservicios, colmados, ultramarinos, centros comerciales, etc….o es que le ponen una espada en el cuello para ir a comprar ahí, llorón.

* Podría seguir con las muchas observaciones que tan solo en cuestión de unos minutos me han llevado a subir mi adrenalina por las injusticias de la vida pero que he podido aliviar contestando a este señor, el cual ha decidido callarse, no sé si por precaución o porque se lo ha pensado mejor y ha querido rectificar su craso error, eso le honra.