—…iiiihhhjjjjj…iiihhhhjjjjj..
–Relinchó Sinfonía al verlo.
—No te asustes,
es un perrillo perdido. —Le dije a mi yegua.
De repente salió al paso y se paró delante de nosotros, tenía cara de hambriento, le di un cacho pan que tenía y se lo comió en menos que canta un gallo, era un perro que no había visto nunca, blanquecino y grisáceo….
Os enseño como me está quedando la tercera
caja de vino, dedicada a la Siberia.
Necesito un perro
que tire del trineo, así que ya sabéis buscar entre los juguetes de vuestros
hijos, ¡total, ahora lo que impera son los videojuegos! No lo echaran en falta…..
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Personas son, las que utilizan palabras sin ánimo de herir sensibilidades u ofender a otros semejantes. Aquel que no respete esta máxima, no hace falta que pierda el tiempo...