-¿Cómo estas Tomas? –Le dije mientras abrazaba a sus
hijos en la mesa del comedor.
-Muy bien Cisvirer, siéntate y toma un cacho de pan, no
estaría tan bien si dentro de unos años, mis hijos me hicieran lo que le ha
hecho Arturo, el hijo del zapatero a su padre. –Me contestó.
-Cuanta razón tienes Tomás, después de todo lo que hizo
su Padre por él y ahora viene a pedirle monedas para sus deudas y exclama: “¡sin
condiciones!” –Comentamos los dos.
-El padre le ayudará ¡es obvio! Tú lo conoces como yo. –Me
dijo desde dentro de su ser, como si fueran sus hijos.
-Cierto es Tomás, pero aquí hay una cosa muy importante
y es que el hijo no ha tenido vergüenza al pedirlo y con prepotencia y el Amor
del padre está muy por encima de las monedas…..
Vaya cara o “geta”
como se diría ahora que tiene el señor Artur Mas i Gavarró al pronunciar sus palabras con
prepotentes maneras para pedir dinero de TODOS y no de Cataluña como dice su señoría.
Con estas palabras que hace el y otros, no solamente él,
va subiendo el mercurio de un termómetro que parece no parar y que
inconscientemente todos los españoles pensamos aunque sea por unos momentos en
que pasaría si cada vez que visitáramos un comercio eligiéramos productos de
cualquier preciosa Tierra de España menos de las Catalanas, pero claro, luego
te enfrías y piensas: ¿merece la pena?, pues no, todas las Personas de esas
maravillosas Tierras, no tienen la culpa de que este señor diga chorradas a
pesar de tener unos estudios superiores, de tener mucha experiencia y por
supuesto de cobrar una barbaridad.
Para recibir hay que ser Humilde y para pedir, mucho Mas.
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Personas son, las que utilizan palabras sin ánimo de herir sensibilidades u ofender a otros semejantes. Aquel que no respete esta máxima, no hace falta que pierda el tiempo...